Todo lo que soy es gracias a mi entorno.

Uno piensa en momentos de reflexión en como le van las cosas y yo siempre reparo en la suerte que tengo, en lo que me ha tocado vivir. Los valores y principios de cada uno son variables, tan distintos como gustos, colores, sabores; según tu estado, tus vivencias, tu entorno...Siempre he creído que el valor de la amistad es algo muy importante y reconozco que a menudo la gente me llega rápido al corazoncito. Creer en las personas resulta fácil cuando tiendes a rodearte de gente buena. A veces pienso que tengo un  imán y a medida que pasa el tiempo resulta más sencillo.

Recuerdo ser más joven y pasar por distintas etapas donde todo me afectaba muchísimo y no entendía muchas cosas, pero a medida que cumplo años me doy cuenta que es inevitable que tengamos desengaños. Es cuestión de saber administrarlos y gestionar el nivel de importancia que tienen. Cuenta hasta diez, ¿recuerdas?

A lo largo de mi vida he conocido a muchísimas personas que han tomado otros caminos o permanecido en el mío, y que de una forma u otra han dejado huella en mi interior, y han ayudado a que sea tal y como hoy me considero: una buena persona, trabajadora, constante, luchadora, y muy camaleónica pues a veces soy muy aventurera, guerrera o ñoña
Atrevida y con cierto grado de locura controlada, y así me encuentro continuamente en fases de cambios que me llevan a experimentar, sentir, vivir las cosas a mi manera. Algo así como bailar al compás de la música.

¿Estamos predestinados? No lo sé, no tengo la más remota idea de si es destino, o azar, o si es ley de atracción, lo único que sé es que vamos labrandando el camino.

El Blog De Maca

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